Comience cortando la carne y las verduras en trozos finos del tamaño de un bocado.
En una sartén grande, agregue 1 cucharada de aceite de oliva y déjelo a fuego medio-alto.
Derrita 1 cucharada de mantequilla y luego agregue 1 cucharada de salsa de soja a esa misma sartén, luego el pollo y sazone con sal y pimienta al gusto. Asegúrate de revolverlo con frecuencia. Una vez que esté bien cocido, déjelo a un lado y cúbralo con papel de aluminio.
En la misma sartén, agregue 1 cucharada de mantequilla, 2 cucharadas de salsa de soja y todas las verduras (cebollas, calabacines, brócoli), junto con sal y pimienta al gusto. Cocine hasta que estén lo suficientemente tiernos como para pellizcarlos con un tenedor, es decir, de 7 a 8 minutos.
Luego agregue el pollo y los champiñones nuevamente en la misma sartén, junto con las verduras.
Agregue una cucharada extra de mantequilla y la última cucharada de salsa de soja y termine de cocinarlos hasta que los champiñones estén tiernos y el pollo esté bien caliente.
Si es necesario, agregue más sal y pimienta y luego agregue un poco de jugo de limón justo antes de servir.